Macarena. Fue una de mis primeras novias de este año y es un excelente ejemplo de que la tradición también puede ser moderna.
Se habla mucho de novias millenials y todas las marcas de novia se están obsesionando con llegar a mujeres que optan por el minimalismo para uno de los mejores vestidos de su vida. Sin embargo creo que con Macarena conseguimos ir más allá de eso y hemos creado un vestido que me gusta especialmente porque logra un equilibrio entre lo clásico y lo bohemio, consiguiendo un cierto aire onírico.
Es un look de 2 piezas que no cae ni en la simplicidad ni en la exageración.
Una falda barroca, totalmente bordada a mano con figuras geométricas – basada en uno de mis modelos de la colección Singular – creando así una pieza que es una auténtica obra de arte para combinar con una blusa también acabada con un bordado similar en las mangas y una preciosa botonera en la espalda. La guinda la puso mi amigo Luis Benitez, uno de los mejores sombrereros de Sevilla y de España, con un tocado que es una auténtica maravilla.
Y ya sobran las palabras… Macarena ha sido una gran novia LORENAPANEA, le deseo lo mejor y me enorgullece haber formado parte de su historia.